Consecuencias de la pandemia en la salud mental
- Según la OMS, los niveles de ansiedad y estrés han aumentado de manera considerable durante la pandemia.
- El 46% de la población española manifestó un aumento del malestar psicológico durante el confinamiento.
La pandemia de la COVID-19 ha cambiado de manera considerable la forma en la que hemos vivido en el último año y medio. La alteración de las rutinas diarias, las presiones económicas o el aislamiento social, ha generado incertidumbre y desasosiego en nuestra forma de vivir.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los problemas de salud mental han aumentado durante la pandemia, generando un incremento notable en los niveles de ansiedad y estrés. Según datos del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), durante el primer año de pandemia, un 6,4% de la población ha acudido a un profesional de la salud mental por algún tipo de síntoma. Hasta un 43,7% de los pacientes acudieron por ansiedad y un 35,5% por depresión.
Las mujeres son las más afectadas
La fatiga pandémica afecta de forma desigual según el sexo, la edad o las condiciones económicas de cada persona. Según la Dra. Raquel Polo, psiquiatra de Hospitales Universitarios San Roque Maspalomas y Vecindario, uno de los grupos sociales más afectados por la pandemia han sido las mujeres. Un estudio realizado en varios centros hospitalarios indica que en los meses de pandemia, la prevalencia en las mujeres ha sido del 33% por ansiedad y del 28% por depresión.
Además, según la Dra. Polo, la pandemia ha afectado de forma especial a las mujeres embarazadas, con un incremento en los casos de depresión y ansiedad postparto, debido al menor apoyo social y al miedo a los contagios.
El aislamiento social en jóvenes y niños
Durante el transcurso de la pandemia, diferentes especialistas señalaron el impacto negativo que las restricciones y el aislamiento social traería aparejado en jóvenes y adolescentes.
Las distintas restricciones llevadas a cabo provocaron un aumento exponencial de ingresos de niños y adolescentes en hospitales por problemas graves de salud mental, con conductas autolesivas, trastornos depresivos y alimentarios, así como abuso de nuevas tecnologías.
En una etapa donde la sociabilización y la identificación con los iguales es vital para el desarrollo de las habilidades sociales, este tipo de aislamiento social tiene consecuencias negativas a medio y largo plazo.
Según la Asociación Española de Pediatría (AEP) los principales factores de riesgo en menores durante la pandemia han sido la incertidumbre, el exceso de noticias, el distanciamiento social y familiar, así como la ausencia de rutinas, el abuso de pantallas, los ritmos irregulares de sueño o un patrón de alimentación menos saludable.
La economía es otro factor destacado
El factor económico también ha sido una razón determinante para un deterioro de la salud mental. Una encuesta del CIS revela que el porcentaje de personas de clase baja que se han sentido decaídas, deprimidas o sin esperanza durante la pandemia, casi duplica al de aquellas que se identifican con la clase alta (32,7% frente a 17,1%).
Según el Dr. Agustín Miranda, especialista del servicio de psiquiatría de Vithas Las Palmas: “Los factores sociales, como la crisis económica y sus efectos en el mercado laboral, pueden incrementar la preocupación de las personas y, consecuentemente, que su salud mental se vea afectada”.
La pandemia ha afectado de manera más notable a las personas con menos recursos, particularmente a las que ya contaban con una persona con trastorno mental en la familia o bien han visto como alguno de los miembros empezaba a padecer alguna de ellas.
Las dificultades económicas y de conciliación de trabajo y familia ha supuesto una preocupación más a la ya delicada situación social y sanitaria.
Grandes profesionales a su disposición
Si siente algún tipo de síntomas que pueda considerar preocupante o le produzca inestabilidad emocional, es importante acudir al médico y buscar ayuda de especialistas. En palabras del Dr. Miranda “no todo el mundo responde de la misma manera a las situaciones de estrés. Desde los antecedentes psicopatológicos y emocionales, del apoyo social de sus familiares y amigos, así como de factores como su estado de salud o su situación financiera y laboral”. En el caso que tenga un tratamiento por un trastorno de salud mental, es imprescindible continuar tomando la medicación según las instrucciones. Si acude periódicamente a un especialista en salud mental, es importante seguir acudiendo hasta completar el tratamiento o la terapia.
En +Sanidad Canarias, la Asociación de Clínicas y Centros de Hospitalización Privadas de Las Palmas, contamos con profesionales en Psicología y Psiquiatría que velan por la salud mental de los pacientes, ayudando a identificar los síntomas y llevando a cabo un tratamiento para mejorar su día a día.